lunes, 28 de noviembre de 2016

Volando entre capas de colores

Manchas, texturas y líneas que nos volvieron locas a Ali (ella dice que flotaba entre trazos de acuarela) y a mí gracias a la maestría minimalista con que las trabaja Sebastien Laudenbach. Seguiremos su obra porque Le jeune fille sans mains es preciosa. Lorena dijo que era la película que más le había gustado, aunque es verdad que pudo ir a pocas, este año. ¡Mil gracias a Luis por recomendármela!


1 comentario:

Santiago García dijo...

Qué ganas tengo de verla. De todas las que comentas es la que más me apetece. Claro que todavía no he visto todo